Conoce el campus universitario

Noticias Universidad Andina

22 textos indagan los nuevos lenguajes del cine documental

17 de septiembre, 2018

La permanente búsqueda de nuevas lecturas de los clásicos de la producción audiovisual es el corazón de La mirada insistente. Repensando el archivo, la etnografía y la participación, libro editado por Christian León y María Fernanda Troya, y presentado la semana pasada en la Universidad Andina Simón Bolívar.

Se trata de la “resemantización de los mismos problemas desde nuevas miradas”, según escriben los editores en el prólogo.

Cinco secciones agrupan 22 ensayos: Los pliegues de la memoria: entre lo público y lo privado; Archivo, documento y ficción; Memoria, política y militancia; Etnografía, participación, y colaboración; y Experimentación, conflicto y violencia.

Este recorrido permite reencontrarse con las producciones, y la relación del documental con las realidades. Son textos que nacieron en los III y IV coloquios internacionales de Cine Documental realizados en mayo de 2015 y mayo 2016, en colaboración con el Festival Encuentros del Otro Cine (Edoc).

El giro subjetivo, la experiencia personal y las pequeñas historias son las inquietudes contemporáneas que se recogen en la primera sección.  Su primer texto “advierte que en las dos últimas décadas existe una renovada atención por parte de cineastas, académicos e instituciones por la preservación, la relectura y la reutilización del cine casero, doméstico y amateur como una forma de entender el pasado desde su dimensión sensorial, corporal, íntima y familiar”

Orisel Castro habla del found footage, de esos nuevos lenguajes y usos del archivo presentes en el nuevo documental ecuatoriano. La narración no lineal, la entrevista, el punto de vista personal y el archivo son los recursos que identifica el autor para la construcción de una narración alejada de la exposición de la verdad.

Etnografías alucinadas es el título del texto de Josep Català, en el que expone la idea de que la mirada de la actual generación no compagina con las nuevas realidades. Por tanto, dice  Català, “la primera acción política de importancia pasa por crear una nueva sensibilidad capaz de detectar lo que ocurre realmente”.

Valeria de los Ríos y Catalina Donoso escriben sobre el archivo y la ficción. Reflexionan sobre la existencia o no de la objetividad del documental, y de la función del archivo. Su disertación va de la mano de documentales como El otro día.

El cine como archivo de sí mismo, de Tomás Dotta, también gira en torno a las  mismas preocupaciones. Compara la labor del cineasta con la del historiador, tomando como referencia lo propuesto por Walter Benjamin: la Historia es un proceso, no como un curso natural y objetivable.

“Las estrategias de representación que están detrás de las obras audiovisuales -dice Santiago Molina- se proponen instalar una discusión sobre las certezas estéticas e institucionales de lo que usualmente consideramos como documental”.

Los aportes continúan con Javier Medina, Lúcia Ramos Monteiro, Luciana Carla de Almeida, Kike Cubero, Pablo Antonio Vázquez, Carlos Y. Flores, Pablo Mardones, Natalia Möller González, Mariana X. Rivera García, María Isabel Vargas, Andrea Oliver Sanjusto, Pedro Adrián Zuluaga, María Fernanda Arias Osorio, Juan Carlos Arias Herrera y Ana María López C.

A lo largo de las cinco secciones, los textos hilan reflexiones que ponen en debate conceptos, y buscan aportar consideraciones para la comprensión de las transformaciones del cine documental.

Christian León y María Fernanda Troya subrayan preocupaciones que se reiteran a lo largo de estos estudios, y los recogen a través de conceptos: archivo, memoria, dictadura, violencia, identidad, política, resistencia, decolonialidad; etnografía, antropología visual, entre tantos otros. Se trata de esas miradas insistentes en el cine documental.

 

STR