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El Observatorio de Salud, un escenario de interacción entre varios actores

29 de octubre, 2012

El Área de Salud de la Universidad Andina Simón Bolívar, Sede Ecuador inauguró hace pocos días el Observatorio Regional de Salud Colectiva, Ambiente y Sociedad, con la presencia de miembros de la Organización Panamericana de la Salud, del Instituto de Estudios Ecologistas del Tercer Mundo, comunidades y organizaciones campesinas, y autoridades de esta casa de estudios.

Se trata de un nuevo espacio de información y análisis científico, donde se involucran distintos campos para abordar la salud, el ambiente y la sociedad. No obstante, su trabajo no es solo ser un escenario donde circule mucha información sino que la gente pueda convertirlo en su espacio de acción, donde la comunidad académica y las organizaciones indígenas se sirvan de él para llevar los conocimientos a su práctica.

El Área de Salud de la Universidad tiene un papel protagónico a nivel regional y continental, que implica mirar la salud desde una perspectiva integral, interdisciplinaria e intercultural. De ahí que seres humanos, flora, fauna, ambiente, cultura, modos de vida, economía… todos están relacionados entre sí.

Desde esta perspectiva, el Observatorio recientemente inaugurado crea un encuentro entre las ciencias sociales, ecológicas y de la salud, que unifica las preocupaciones ambientales con las transformaciones socioeconómicas y los impactos en la salud, es decir, la ciencia al servicio de la sociedad.

Esta importante herramienta servirá para realizar un monitoreo crítico, ya que articula las evidencias científicas, los testimonios sociales y otros documentos útiles para avanzar en la incidencia de las prácticas innovadoras, tanto en el campo de la salud colectiva y el ambiente cuanto en las terapias integrativas, por ejemplo.

Su vínculo con la academia

El Observatorio, al estar ligado a la Universidad, está correlacionado con el programa de Doctorado en Salud y Ambiente. De hecho, permite mostrar las valiosas contribuciones de los investigadores del área: Germán Rodas, Jaime Breilh, Raúl Mideros, José Luis Coba, Omar Vallejo y María Cristina Cruz.

Su enfoque como tal se dirige hacia 10 ejes: Aceleración, cambio climático y salud; Agroindustria, minería e industria en general; Espacio urbano, ambiente y salud; Sexualidad y género; Derecho, comunicación en salud, discapacidad; Pequeñas economías, soberanía y salud; Uso peligroso de tecnologías; Salud intercultural, humanización obstétrica; sistemas terapéuticos complementarios; e Historia de la salud.

Para el doctor Jaime Breilh, director del área, uno de los grandes problemas de la falta de conciencia de nuestro país y América Latina, en general, respecto de los problemas de salud y del ecosistema es la carencia de información oportuna, suficiente y transparente de lo que está sucediendo en el mundo. “El Observatorio va a mostrar la actividad investigativa que está basada en las comunidades que tienen problemas tanto de salud como ecológicos, y, además, es una ventana abierta para cualquier persona que quiera informarse sobre estos problemas. Trabajamos con 25 proyectos (Manabí, El Oro, Pichincha, Imbabura, etc.) cada uno tiene que ver con las colectividades que están movilizadas en defensa de su salud y de su vida”, señaló.

Al respecto, Alexander Von Hildebrandt, de la Organización Panamericana de la Salud, consideró imprescindible la creación de esta plataforma que, por cierto, está en alianza con otros observatorios similares de América Latina: “Está basada en evidencias científicas lo cual es clave contra ese fenómeno que se viene encima, por lo que tenemos que estar muy fuertes”, dijo al referirse a que los factores que terminan con la salud son ambientales y sociales, no solo biomédicos. Añadió con notable preocupación que en la última reunión de seguridad química, en Nairobi, se confirmó el abandono global de seguir denunciando las acciones de la agroindustria, la industria de la nanotecnología y de los fármacos, y el conglomerado de grupos transnacionales que han logrado socavar una cantidad de buenas iniciativas, manipular la información y llevar al ser humano a una situación de duda.

El Observatorio está dirigido a organizaciones y movimientos sociales, comunidades académicas, tomadores de decisiones del sector público, actores políticos, líderes sociales y sindicales y a la comunidad en general. En definitiva, está orientado a todos los sujetos sociales interesados en fortalecer una visión crítica de la salud y el ambiente y aportar en la construcción de soluciones.

El Observatorio puede consultarse en: https://www.uasb.edu.ec/saludyambiente/