“Reformar la seguridad social en nuestros países implica realizar transformaciones conceptuales, no únicamente operativas. Solo de esa forma lograremos cambios sustanciales”. Con esta afirmación, Jaime Breilh, rector de la Universidad Andina Simón Bolívar, Sede Ecuador, clausuró el Encuentro Andino de Universidades y Centros de Investigación en Seguridad Social que tuvo lugar en el campus universitario, la semana anterior.

El profesor Breilh enfatizó en la importancia de comprender que “las contingencias que atiende la seguridad social no son individuales, sino socialmente producidas. Por lo tanto, si la mirada no es integral, la planificación resulta restrictiva”.

El Encuentro Andino de Universidades y Centros de Investigación en Seguridad Social, que fue organizado por la Universidad Andina y la Organización Iberoamericana de Seguridad Social (OISS) tuvo como propósito establecer un espacio de diálogo y cooperación entre las universidades y los centros de investigación para incidir en el desarrollo de la agenda política de la seguridad social en los países del área andina.

La cita, a la que asistieron más de 100 personas de Ecuador y Colombia, estuvo marcada por el diálogo y la participación, sin incidencias ni mandatos. Así lo aseguró Jorge Bernal, director adjunto para el área andina del OISS, quien agregó que “es necesario volver efectivos el intercambio y el relacionamiento que nos hemos propuesto entre las instituciones académicas, gubernamentales y sindicales para fortalecer la conformación de una red que nutra la labor que desarrollamos”.

Emilio Carrasco, Director del departamento de Seguridad Social de la Universidad Externado de Colombia recogió las conclusiones a las que los participantes llegaron luego de tres días de trabajo y que deberán plasmarse en acciones concretas en los próximos dos años.

La primera se centró en la conformación de un observatorio de seguridad social con un enfoque derechos, para la región andina. Asimismo, se propuso el desarrollo de actividades de cooperación mediante la ejecución de programas académicos y de investigación.

En cuanto a la formación –explicó Carrasco- los asistentes señalaron la importancia “de que las universidades contribuyamos no solo con posgrados sino, también, con programas de formación continua y enfocada hacia sectores y poblaciones específicas. Por ejemplo, capacitaciones dirigidas hacia las organizaciones sindicales”.

En cuanto a la relación que la Academia y las autoridades gestoras de las políticas públicas mantienen, se advirtió la necesidad de desarrollar una mayor proximidad entre ambos grupos. De igual manera, entre la Academia y el sector trabajador. En este último caso a través de un reconocimiento auténtico –de uno y otro- que les permitan la realización de aportes desde sus respectivas áreas.

Finalmente, dijo Carrasco, se coincidió en fortalecer y en concretar a través de actividades específicas, la relación que existe entre las instituciones académicas y los centros de investigación para, juntos, reflexionar respecto de la seguridad social.

De esta forma, la Academia marca la ruta para una activa participación, a través de espacios de cooperación que potencien la formación y la investigación, en un momento en el que se anuncian nuevas reformas a los sistemas de seguridad social en el área andina.