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El Inti Raymi se vivió en la Andina con danza y música

26 de junio, 2012

Por Silvia Coral
Periodista de Relaciones Públicas

En una tarde tibia, la Universidad Andina Simón Bolívar celebró la Fiesta del Inti Raymi, como una demostración de que la cultura indígena ecuatoriana aún mantiene vivas sus raíces. También se conoce como la Fiesta del Sol porque se relaciona con el solsticio de verano y coincide, justamente, con la cosecha de los productos y la maduración del maíz.
 
Esta importante celebración inició con un desfile de comparsas en el que participaron el personal de la Universidad Andina, así como estudiantes de la Universidad Politécnica Salesiana como invitados. Los danzantes partieron desde la calle Isabel La Católica, avanzaron por la Madrid y llegaron hasta las instalaciones de esta casa de estudios, en la calle Toledo, donde fueron recibidos por el rector Enrique Ayala Mora, autoridades y miembros de la comunidad académica, quienes se mostraron complacidos y orgullosos de festejar, una vez más, esta ceremonia andina.
 
Con los tradicionales bailes indígenas de la provincia de Imbabura se prendió el Inti Raymi e inició, ahora sí, con una ligera llovizna que amenazaba con ser más copiosa. Pero el ánimo de los asistentes no decayó y cada unidad académica y administrativa se hizo presente con la entrega de tumines a los priostes, como parte formal de este rito. Las palabras de agradecimiento del Rector de la Andina se hicieron extensivas tanto a los organizadores del programa como al mismo Dios Sol.
 
Un castillo de frutas, así como la comida y la bebida propias de la madre tierra, en recuerdo a nuestros ancestros, fueron repartidos a los invitados para su degustación, quienes no vacilaron en contribuir con su presencia en esta tradicional conmemoración, que la institución realiza por tercer año consecutivo.
 
Finalizada la comida, los grupos de música y baile nuevamente se tomaron la fiesta, resaltando así que el Inti Raymi es importante para toda la población ecuatoriana.

Una manifestación del pueblo kichwa
La misión de la Universidad Andina Simón Bolívar es contribuir con el fortalecimiento de los procesos culturales de la región; de ahí que es muy importante para esta casa de estudios la conmemoración del Inti Raymi, además porque esta fiesta indígena es la constatación de la continuidad y la fortaleza del pueblo kichwa.
 
Para el director del Área de Letras y coordinador de la Cátedra sobre Pueblos Indígenas de América Latina, Ariruma Kowii -organizador de esta celebración-, la preservación del Inti Raymi permite la articulación con otras culturas. “Esta fiesta se mantiene vigente, nos ayuda a mantener nuestra identidad y a mostrar lo que somos”.
 
La Fiesta del Sol marca el inicio de un nuevo año para los pueblos indígenas, por eso es necesaria una preparación física y espiritual. Con antelación, los habitantes realizan una reflexión y una autoevaluación para que, al llegar el 22 de junio, estén listos para practicar el ritual del baño. Este simboliza el despojo de las energías negativas y la recuperación de energías nuevas.

La cosmovisión indígena
Para los pueblos indígenas, el Inti Raymi es una conmemoración solemne matizada por muchos símbolos que confluyen hacia un mismo significado: el agradecimiento al Dios Sol y a la naturaleza en general.
 
El prioste es un elemento importante y es un honor ser nombrado con esta dignidad. Es quien se encarga de los preparativos de la fiesta y quien corre con los gastos.

No hay Inti Raymi si no está presente el aya huma, aquel personaje enmascarado que hace de intermediario entre el hombre y la naturaleza.
 
La comparsa se llena de vida cuando los danzantes se meten en sus personajes con disfraces y atuendos cargados de color. Los músicos, por su parte, hacen de las suyas bailando, cantando y girando en forma de espiral y representando así los movimientos de la Tierra.
 
Es la única fiesta andina que ha logrado globalizarse en el mundo porque está presente en otras latitudes del planeta, gracias a la presencia de nuestro pueblo indígena que ha perpetuado esta ceremonia desde la época del Incario.