¿Se imagina degustar cerveza de ají, guayusa de hierba luisa y canela, granola de amaranto, orito con chocolate, leche de quinua con chocho o mortadela de llama? Esto y más es lo que se saboreó en el Primer concurso sabores y delicias de nuestro Ecuador, cuya feria-degustación y premiación se realizó el pasado martes 5 de agosto, en la Universidad Andina.

Este concurso, organizado por primera vez por el Centro Latinoamericano para el Desarrollo Rural, con el auspicio de la Agencia Belga de Desarrollo (GIZ), el Consorcio de Gobiernos Autónomos Provinciales del Ecuador (CONGOPE) y el apoyo del Observatorio de la PyME de la Universidad, llamó la atención de estudiantes, profesionales, empresarios, chefs, medios de comunicación y público en general.

De un total de 170 empresas de emprendimientos inscritos se escogieron a 20 pequeñas y medianas empresas para que expongan sus innovadores productos en este concurso. Entre las empresas participantes los asistentes pudieron degustar chocolate semi oscuro, dulce de mashua, risotto de quinua, mermelada de uvilla, chocolate orgánico con chocho, especias artesanales (de quinua, albahaca, eneldo, cilantro, ají, pimienta negra y blanca), té de 20 hierbas medicinales, barras energéticas (de chocho, granos andinos y frutas tropicales), chochos fritos, guayusa de hierba luisa y canela, miel de penco, entre otros.

Para escoger a los 20 finalistas que participaron en esta degustación, según Carolina Porras, (del Centro Latinoamericano para el Desarrollo Rural) se privilegió a jóvenes emprendedores y a empresas con productos innovadores.

Para Wilson Araque, coordinador del Observatorio de la PyME, el desafío de la realización de este evento fue desarrollar la creatividad y la innovación y eso es lo que mostraron los participantes en el concurso.

Araque también hizo referencia a que cada uno de los productos que se degustaron dieron un paso más adelante en la creatividad y la generación de ideas. El resultado de la creación de productos novedosos es haber perseverado en un objetivo, de haber lanzado muchas ideas locas y de haber concretado algo fuera de serie y nunca antes visto y degustado.

Sonia Lehmann, de la Cooperación Técnica Alemana (GIZ), en cambio hizo referencia a los pasos que se deben dar para buscar mercado a esos productos innovadores y para ello, a pesar de lo difícil que es colocar un producto en el mercado, lo importante es tener un alimento étnico o natural, tener un uso distintivo y un empaque atractivo.

Después de tres horas de degustación de los productos participantes y de una ardua deliberación del jurado, que estuvo conformado por las empresas organizadoras y auspiciantes, se escogió a cinco ganadores entre los pequeños y medianos emprendedores que se destacaron por la creación y elaboración de productos agroalimentarios procesados, innovadores y de calidad.

Los triunfadores fueron:

• Chocolate Artesanal: producto barra de chocolate semi oscuro vegano Huerta de Ina: condimentos sales marinas
• Freschcosta: hocolate de uvilla y sal
• Runaturpuna: te de guayusa de hierba luisa y canela
• Fungus Garden: hongos shitake en escabeche

Los ganadores recibirán apoyo para el emprendimiento de su empresa, difusión de su producto innovador en los medios de comunicación y su participación con un stand en uno de los eventos gastronómicos más importantes del país denominado Latitud Cero, que se realizará en octubre.